Procrastinación es la acción de aplazar, de retrasar algo que tenemos que hacer pero para lo que no encontramos fuerza ni motivación, y que vamos posponiendo en favor de otras acciones que nos resultan más agradables e ilusionantes, aunque sean mucho menos importantes.
A todos nos ha pasado alguna vez, ¿verdad?
Hoy vamos a conocer 5 pasos para vencer la procrastinación, que te ayudarán tanto en el ámbito de estudio como en el del trabajo. O aunque tengas que reparar ese desperfecto en casa que nunca arreglas…
- Desfragmenta. Quizá eso que tienes que hacer es una tarea enorme que, por su volumen o por su complicación, te termina agobiando y no sabes ni por dónde empezar. Hazlo dividiéndola en acciones más pequeñas y asumibles, y haz una por una, solamente una cada vez, no todas de golpe.
- Establece un plazo. Si no tienes una fecha para concluir esa tarea (un examen al que presentarte, el día en el que entregar un determinado informe o proyecto) debes fijarlo tú mismo. Si no tienes esa fecha de finalización establecida es muy complicado que nos centremos, la distracción llegará mucho más fácilmente y volveremos a posponer con la justificación de que «total, no hay prisa».
- Déjate de excusas. Seguro que cuando procrastinas por tu mente aparecen frases como «tengo tiempo de sobra», llega la pereza cuando no hay ganas de ponerse a ello y, finalmente, las excusas como «ahora estoy ocupado con esto, luego lo hago». Nada de eso. Tienes que pasar a la acción y ponerte manos a la obra. Porque, al final, te puedes terminar agobiando al ver que no llegas a tiempo.
- Date una recompensa. Se trata de encontrar la motivación que te lleve a la acción y a dejar de posponer las cosas, así que cuando hayas cumplido con lo que tenías que hacer hazte un regalo. Lo que más te guste: comerte tu helado preferido, ver un capítulo de la serie que te tiene enganchado, pasar la tarde en la piscina o comprarte una camiseta nueva.
- Evita distracciones. Muchas veces dilatamos las cosas en el tiempo porque siempre hay algo que nos distrae y nos hace perder la concentración. No consultes tus redes sociales, deja lejos el móvil y apaga la televisión. Debes ponerte manos a la obra sin que nada se interponga entre tú y esa tarea. Sólo así conseguirás empezarla de una vez.
Ponte en marcha. Es por tu bien, aunque tu propio bien a veces te genere cierta angustia… 😉
Guardar
Guardar
Guardar
Guardar
Guardar
Guardar